CAJA RICA, JUBILADOS POBRES
La Caja de Seguro Médico y Previsión Social de la provincia de Buenos Aires goza de superávit, pero lo que ganan sus pensionados no les alcanza para superar la línea de pobreza. Los jubilados cobran apenas más de mil pesos mientras su institución invierte millones de pesos en propiedades. Envejecer, amén de ser inexorable, tiene su costado agradable: es la etapa adecuada para disfrutar de los logros y frutos conseguidos a lo largo de una vida llena de trabajo, responsabilidades y preocupaciones. Los profesionales universitarios, en su mayoría, aportan a lo largo de su carrera a una caja o seguro provisional, para consolidar un futuro sin sobresaltos económicos. Así es, al menos, en la teoría. En Argentina no hace falta ser un jubilado de aportes mínimos al Estado para cobrar mal. En la provincia de Buenos Aires, los jubilados y pensionados de (la Caja, de aquí en más) se quejan desde hace dos años de que ganan mal y que apenas cubren sus gastos esenciales.
LA CAJITA FELIZ
La Caja es una institución autárquica creada en 1962 por el Colegio de Médicos provincial con el fin de “organizar y administrar un sistema de previsión y seguridad social fundado en los principios de solidaridad profesional complementado con la equidad que relaciona los aportes efectuados con los beneficios a percibir”, según se puede leer en el apartado institucional de su página web (www.cajademedicos.com.ar). Actualmente, recibe los aportes de más de 46 mil médicos y le paga a 8 mil beneficiarios, 3.900 de los cuales son jubilados y 4.100 pensionados. El destino de los fondos recaudados por la Caja no es únicamente previsional. Gracias a la ley 12207 (que fue modificada por las leyes 12696/01 y 13341/05), la entidad está habilitada para volcar dinero a “inversiones inmobiliarias, títulos y valores de la renta pública”. De todos modos, existe un límite: “El Directorio no podrá invertir los fondos de la Caja con otros fines que los mencionados”, reza la ley.
Curar con Opinión pudo averiguar que, la Caja está en condiciones de mejorar sus prestaciones. Posee un patrimonio valuado en 686 millones de pesos, más 65 millones que tiene en el Banco Provincia de la época del “Corralito”, en diciembre de 2001, que aún no fueron recuperados y por los que hay un reclamo que llegó a la Suprema Corte de Justicia. Dentro de sus propiedades, se pueden contar varias adquisiciones inmobiliarias en zonas urbanas y rurales, como parte de “proyectos de explotación forestal dentro del marco legal que nos rige”, informa un panfleto de la entidad entregado a los aportantes en 2005. Entre los bienes raíces se destacan dos campos, uno en Lobería, y otro en Necochea, ambos en la provincia de Buenos Aires. También figura la adquisición de una estancia en la localidad correntina de Ituzaingo y la construcción de departamentos de 2 y 3 ambientes en la ciudad en Junín. Solamente en el transcurso de 2006, el monto total destinado a compra de inmuebles asciende a más de 32 millones de pesos. Pero no es lo único en lo que gasta la Caja. En el último ejercicio, figuran 516 millones de pesos en concepto de inversiones a futuro, que abarcan desde títulos y acciones hasta bonos “Boden” y plazos fijos en dólares tanto en el Banco Provincia como en el Banco Nación. En rigor, no existen maniobras ilegales en el uso de los fondos. Pero los jubilados dicen que el dinero utilizado para estos fines provisionales impide que ellos puedan cobrar más. Juan Carlos Alvarez Gelves y Pablo Caffé, dos médicos de La Plata, disparan contra la actual gestión de la entidad.
LA VACA ATADA
La Caja está presidida por un Directorio, encabezado por Juan Alfredo Córdova, que llegó al cargo en 2006 luego de ser tesorero en la gestión anterior. Todas las decisiones que toman el conjunto de directivos deben ser aprobadas por una asamblea de representantes integrada por médicos de los diez distritos que abarcan la totalidad del territorio de la provincia. Lo mismo sucede con las memorias y los balances de cada año. El último balance arrojó un superávit de 67 millones de pesos. Desde su creación, la Caja nunca tuvo déficit.. Los pasivos de la Caja exigen cobrar un mínimo de 1400 pesos, lo que le demandaría a la entidad 32 millones pesos más de gasto. Menos de la mitad del superávit conseguido el año pasado. Y el mismo importe que se usó para comprar inmuebles. “Hay muy pocos jubilados representantes en las asambleas y por eso siempre perdemos en las votaciones. Los nombramientos se hacen a dedo y como la excusa es que para subir las prestaciones hay que aumentar el valor de los aportes, todos los médicos en actividad se niegan a tratar el tema”, explica Carlos Mirole, médico y vicepresidente de la Asociación de Médicos Jubilados de la provincia de Buenos Aires (AMEJU). Raúl Valente, presidente del Colegio de Médicos de la Provincia, admite el conflicto y dispara contra los sueldos que perciben los directivos.
Las asambleas suelen ser cortas, pero muy polémicas. Por ejemplo, en 2005 se aprobó la moción para que los presidentes y directivos puedan ser reelegidos hasta dos veces consecutivas, lo que implica un período total máximo de 12 años al frente de la Caja, ya que cada mandato dura cuatro años. En la del 2006, se resolvió subir el sueldo en un 20% de los 10 directores de cada distrito. Ahora ganan más de 11 mil pesos por mes. Durante una gestión completa (144 meses), un dirigente podría obtener aproximadamente 1 millón y medio de pesos. El doctor Osvaldo Orduna es el presidente de AMEJU y es uno de los pocos representantes jubilados en las asambleas. Pertenece al Distrito III, correspondiente al partido de Morón y el resto de la zona oeste del conurbano bonaerense. Y denuncia falta de ética en los directivos.
VIVIR AL LIMITE
Según el INDEC, para que una familia no viva debajo de la línea de la pobreza debe ganar no menos de 923 pesos por mes. Pero hay otros criterios que ubican al índice divisorio en niveles más elevados y cercanos a la realidad. Por ejemplo, la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) reclama un salario mínimo de 1290 pesos, mientras que la Fundación de Investigaciones para el Desarrollo (FIDE) calcula que una familia de ingreso medio bajo requiere un presupuesto de 1900 pesos. Un jubilado ordinario de la Caja cobra un total de 1.072 pesos, apenas arriba del límite oficial. No corren con la misma suerte los pensionados, ya que tomando cualquier índice están por debajo de la línea de la pobreza: sólo cobran 809 pesos. Lydia De Langhe de Pedrele, médica de San Miguel, es beneficiaria gracias a sus más de 35 años de profesión. En mayo escribió una carta abierta que apareció publicada en varios boletines de asociaciones de jubilados. Allí aparece un informe detallado de cada gasto que realiza a lo largo de un mes. Y explica que lo que gana no le alcanza.
Para ser beneficiario de la Caja hay que cumplir 35 años de ejercicio permanente y tener más de 65 años de edad. Los médicos tienen cierta reticencia al retiro; pocos son los que lo hacen antes de los 70. Es por eso que el promedio de años en los que un jubilado goza de las prestaciones es de sólo 9,7. Además, la jubilación es obligatoria: por ley, todos los médicos que ejerzan en el territorio provincial deben aportar alrededor de 230 pesos mensuales. Los médicos que trabajan en relación de dependencia deben aportar un 5% del total de sus honorarios. Otro dato a tener en cuenta es la enorme brecha que existe entre afiliados activos y pasivos. En el último período, el número de jubilados creció sólo un 3.6 por ciento. Es decir, que se retiraron alrededor de 30 médicos más. Resulta poco creíble entonces que no se puedan subir los honorarios.
A diferencia de la Caja de Médicos, la mayoría de las demás instituciones previsionales manejan valores más altos para las prestaciones de sus beneficiarios. Por ejemplo, la Caja de Seguridad Social de Escribanos otorga un mínimo de $2.218 para jubilados y $1.552 para los pensionados. La Caja de Farmacéuticos se paga $1.901 y $1.426 respectivamente; y la de Abogados, $1.886 y $1.339. Todas son jubilaciones que se acercan un poco más a la realidad económica del país. Valente explica que, más allá de la polémica que pueda generar los manejos de los fondos por parte de los directivos, lo que cobran los beneficiarios es muy poco.
LA RESPUESTA DEL DIRECTORIO
Los jubilados aseguran que la Caja tiene los recursos necesarios para aumentar los honorarios. Pero desde la institución pocos son los que se animan a tratar el tema en público. El doctor Héctor Sainz, secretario de la institución, señaló el 22 de julio de 2007 en el diario Hoy de La Plata: “Pagamos beneficios que son el doble de lo que abona el sistema de autónomos. Las prestaciones siempre van a ser cuestionadas”. Sobre las altas inversiones financieras, señaló que se realizan con el fin de tener un fondo de reserva que les permitiría enfrentar a una eventual crisis en el sistema.
Curar con Opinión intentó, sin éxito y en reiteradas ocasiones, comunicarse con los directivos de la Caja. Desde la secretaría adujeron que si había inquietudes de jubilados, debían alcanzarlas por escrito hasta la sede central de La Plata. Lo extraño es que muchísimos médicos retirados ya enviaron varias cartas expresando su descontento, pero nunca obtuvieron respuesta alguna. “No les interesa nuestra situación. Los que crecimos junto a la Caja no podemos sentirnos más que defraudados. Ojalá que algún día entren en razón”, sentencia el doctor Orduna. La lógica indica que ante este tipo de casos, habría que esperar. Pero lamentablemente, por una cuestión cronológica, los jubilados ya no pueden seguir aguardando.
LA CAJA EN NUMEROS
- 45 años de vida tiene la Caja. Fue creada en 1962.
- 46 mil médicos aportan actualmente.
- 8 mil es el número total de beneficiarios.
- 3.900 son jubilados.
- 4.100 son pensionados.
- 686 millones de pesos es el valor estimado del total del patrimonio de la Caja. Incluye la sede, in muebles, valores, acciones y plazos fijos.
- 65 millones de pesos tiene en el Banco Provincia. Por ese dinero hay un reclamo judicial desde 2001.
- 67 millones de pesos de superávit arrojó el balance de 2006. Nunca en su historia hubo déficit.
- 516 millones de pesos fue el monto total de la cartera de inversiones durante el último año. Incluye la adquisición de bienes raíces, acciones y plazos fijos.
- 32 millones de pesos fue lo que se gastó en compra de inmuebles. Hay 3 campos y varios departamentos en la ciudad de Junín.
- 32 millones de pesos es lo que le costaría a la Caja acceder a los reclamos de los Jubilados, que pretenden cobrar 1400 pesos. Menos de la mitad del superávit.
- 12 años es el total de años que un presidente o directivo de la Caja puede permanecer en su cargo. Pueden ser reelegidos hasta 2 veces consecutivas, y cada mandato dura 4 años.
- 11 mil pesos aproximadamente es el sueldo que perciben los directivos de la Caja.
- 1.082 pesos es el monto mínimo que cobran los jubilados.
- 809 pesos es lo que cobran los Pensionados.
- 1.923 pesos es el haber mínimo que cobra un jubilado de la Caja de Farmacéuticos, por ejemplo.
- 923 pesos es el valor del índice de la pobreza calculado por el INDEC.
- 35 años deben aportar los médicos antes de retirarse.
- 233 pesos es el aporte mínimo por mes.
- 65 años de edad es el mínimo para jubilarse.
- 9.7 años es el promedio de años que un jubilado goza sus prestaciones.