En el marco de su política de desregulación, el Gobierno promulgó el Decreto 1024/2024, que permite a las farmacias exhibir medicamentos de venta libre directamente en góndolas accesibles al público.
Por Dr. Daniel Cassola
La medida, publicada este miércoles en el Boletín Oficial, lleva la firma del presidente Javier Milei y del ministro de Salud, Mario Lugones. Según el artículo 1° del decreto, los medicamentos de venta libre podrán exponerse en góndolas, siempre que se asegure la conservación de sus propiedades fisicoquímicas.
Los espacios destinados a este fin deberán estar debidamente señalizados y ofrecer información sobre cada producto, incluyendo precios y laboratorios. Además, para adquirir estos medicamentos, el comprador deberá presentar su DNI en caja, como medida para garantizar que sea mayor de 18 años.
Las farmacias deberán exhibir los medicamentos de venta libre en cajas cerradas y acompañados de sus prospectos. Por su parte, los locales no habilitados como farmacias podrán comercializar únicamente antiácidos y analgésicos bajo condiciones específicas. La normativa también habilita a la autoridad de aplicación a ampliar la lista de medicamentos de venta libre autorizados en estos establecimientos.
“La medida busca proteger al consumidor, fijando condiciones de expendio que garanticen un tratamiento veraz de la información y aseguren la libertad de elección sin menoscabar el derecho a la salud”, destacó la administración nacional.
En septiembre, el Gobierno ya había ampliado la lista de medicamentos considerados de venta libre mediante la Disposición 8227/2024. Entre las incorporaciones destacadas están los protectores gástricos, como Omeprazol, Esomeprazol, Pantoprazol y Lansoprazol en concentraciones específicas.
Estos medicamentos se pueden adquirir sin receta en presentaciones de hasta 30 comprimidos o cápsulas y deben incluir los prospectos disponibles en la página web oficial de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT). Sin embargo, las formulaciones pediátricas de estos fármacos permanecen bajo condición de venta con receta.
El cambio en la categoría de estos medicamentos también excluye su aplicación de descuentos por parte de obras sociales y prepagas. Según el Gobierno, la medida se fundamenta en la demostrada calidad, seguridad y eficacia de los fármacos, así como en su historial de comercialización sin reportes de efectos adversos graves en los últimos cinco años.
Esta medida marca un cambio significativo en el acceso a los medicamentos de venta libre, en línea con las políticas de desregulación impulsadas por la administración de Milei.