El plan de vacunación se estanca en medio de un conflicto global por las dosis

Argentina recibió ya 820 mil dosis, que sirven para inmunizar a 410 mil personas, pero para este momento se esperaba contar con cinco millones de dosis de la Sputnik V. La producción está demorada en todo el mundo. Esta semana podrían llegar otras 220 mil dosis.

Por Dr. Daniel Cassola

La vacunación masiva es vista como la salida de la pandemia. Cuando gran parte de la población esté vacunada la vida, y fundamentalmente, la economía podrán retomar un cauce más normal. Las cuentas globales, y las de cada país en particular, lo necesitan. Por eso los estados están en conflicto con las farmacéuticas que o sobrevendieron lo que podían producir o están sufriendo inconvenientes impensados para cumplir con la demanda de vacunas más grande de la historia de la humanidad.

La semana pasada el Fondo Ruso de Inversión Directa y el Instituto Gamaleya comunicaron que la producción de vacunas estará, durante todo el primer semestre del año, atrasada entre dos y tres semanas. En el corto plazo, de aquí a marzo, Argentina solo puede esperar las vacunas que ya le fueron prometidas y continuar con negociaciones para adquirir más. Pero no es un escenario fácil. Todos los países del mundo demandan y Estados Unidos, por ejemplo, cerró su producción a las exportaciones, misma medida que analiza implementar la Unión Europea.

En el horizonte entonces están las vacunas que deben llegar de Rusia más las que se producen entre Argentina y México por el proyecto de la Universidad de Oxford y la compañía AstraZeneca, que a su vez enfrenta demandas en Europa por el retraso de la producción. Otra opción que se maneja es producir la vacuna rusa aquí en Argentina. Para ello el presidente Alberto Fernández instruyó al embajador en Moscú, Eduardo Zuain, para que inicie las negociaciones necesarias. “Mi tarea en Rusia empieza por abogar porque continúen los envíos del modo más regular posible de vacunas a la Argentina. Y conseguir que en la Argentina se empiecen a fabricar vacunas. Vamos a hacer gestiones para iniciar un proceso que termine en eso: Argentina como centro de producción de vacunas. Tenemos que ir por eso”, aseguró el diplomático en declaraciones radiales.

Al pasado viernes se habían aplicado en Argentina 344 mil vacunas de la dosis uno y 65 mil de la dosis dos. Es más de lo que se hizo en cualquier otro país de América Latina pero es irrisorio como total cuando lo que se necesita es vacunar al 70 u 80 por ciento de la población para lograr la inmunidad colectiva. El panorama es complicado en todo el mundo. Madrid y Catalunya, las regiones más pobladas de España, decidieron suspender la vacunación por dos semanas ante la falta de suministro. Italia considera demandar a Pfizer por los retrasos y en Alemania reprogramaron durante diez semanas el calendario original de vacunación. Todos además están atravesando una cruenta segunda ola con una nueva cepa del virus que es más contagiosa que la primera.

Solo en el Reino Unido y en Israel la vacunación tiene un volumen que comienza a ser considerable. Allí se vacunó ya el 11 por ciento de la población. Claro está que falta muchísimo. En todo el mundo las ansias por retomar la vida con algo más de normalidad están a la orden del día. Para eso es necesaria la vacuna, el bien más preciado a nivel global en estos momentos.

.

También te puede interesar...