Por Redacción Curar con Opinión
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dado a conocer recientemente un documento en el que se aborda la cuestión de las dosis de refuerzo de la vacuna contra la COVID-19. Según el informe, la prioridad de una dosis de refuerzo se mantiene solamente para colectivos que incluyen personas mayores, inmunodeprimidas y trabajadores sanitarios.
El Grupo Asesor Estratégico de Expertos de la OMS en vacunas (SAGE) ha dividido a la población en tres grupos de riesgo: alto, medio y bajo, y afirma que la prioridad de nuevas dosis de refuerzo se mantiene solo para el primer grupo, que comprende los tres colectivos citados.
La doctora Hanna Nohynek, presidenta de SAGE, declaró que, aunque se haya vacunado a gran parte de la población, es importante seguir vacunando a aquellos que aún están en riesgo de enfermedad grave, en su mayoría adultos mayores y aquellos con condiciones subyacentes, incluidos con refuerzos adicionales.
Para las personas con riesgo medio de COVID-19 (adultos de menos de 60 años y niños o adolescentes con determinados problemas de salud) SAGE recomienda únicamente un primer esquema completo de la vacuna más una dosis de refuerzo pasado el plazo necesario.
En cuanto al grupo de bajo riesgo (niños y adolescentes), SAGE reconoce los beneficios que las vacunas y dosis de refuerzo pueden tener en su prevención, aunque recomienda reconsiderar su inmunización. Los expertos también recomiendan una dosis anticovid de refuerzo, pasados seis meses o más desde la anterior, a mujeres embarazadas.
Por otro lado, SAGE no recomienda de forma rutinaria los refuerzos adicionales para el grupo de riesgo medio, ya que el impacto en la salud pública de vacunar a niños y adolescentes sanos es comparativamente mucho menor que los beneficios establecidos de las vacunas esenciales tradicionales para niños, como las vacunas conjugadas contra el rotavirus, el sarampión y el neumococo.
Es importante destacar que los países deben considerar su contexto específico al decidir si continúan vacunando a grupos de bajo riesgo, como niños y adolescentes sanos, sin comprometer las vacunas de rutina que son cruciales para la salud y el bienestar de este grupo de edad.
En resumen, la OMS y su grupo de expertos en vacunas recomiendan la priorización de dosis de refuerzo para personas mayores, inmunodeprimidas y trabajadores sanitarios. Para las personas con riesgo medio de COVID-19, se recomienda únicamente un primer esquema completo de la vacuna más una dosis de refuerzo pasados los plazos necesarios. Y para el grupo de bajo riesgo, se recomienda reconsiderar su inmunización, aunque los expertos reconocen los beneficios que las vacunas y dosis de refuerzo pueden tener en su prevención.