Se trata de una de las enfermedades de mayor prevalencia y también mayor subdiagnóstico en el mundo. Se calcula que en Argentina hay alrededor de 4.000.000 de asmáticos.
Por Dr. Daniel Cassola
En Argentina, alrededor de 4 millones de personas sufren de asma, y se registran 15.000 internaciones debidas a exacerbaciones asmáticas. A pesar de los tratamientos adecuados, aún mueren por asma 400 personas al año. Además, se calcula que aproximadamente la mitad de los que padecen la enfermedad no lo saben.
Según el Global Asthma Report 2022 de la OMS, en todo el mundo, el asma afecta aproximadamente al 9% de los niños, al 11% de los adolescentes y al 6,6% de los adultos. La tasa de asma aumenta a medida que las comunidades adoptan estilos de vida occidentales y se urbanizan. Sin embargo, los efectos económicos y humanitarios de esta enfermedad son probablemente mayores en los países en vías de desarrollo, que aportan el 80% de la mortalidad mundial por esta causa.
El asma es una enfermedad en la que se genera una inflamación crónica de los bronquios, lo cual genera estrechez de los mismos. Esto se manifiesta en el paciente como falta de aire, dolor u opresión en el pecho, tos persistente o silbidos al respirar. Estos síntomas generan una limitación en las actividades diarias y la principal consecuencia es un mayor ausentismo escolar y laboral. Aun los pacientes con asma leve sufren de crisis de asma y pueden fallecer como consecuencia de la misma a pesar de tener un diagnóstico de asma leve.
Para lograr un diagnóstico y control del asma adecuado, es importante destacar que es una enfermedad sumamente variable, tanto a nivel poblacional como individual. Existen condiciones asociadas que pueden empeorar los síntomas, o ser factores que dificulten el manejo del asma aún con un tratamiento adecuado. Además, muchos pacientes suelen abandonar los tratamientos ante la falta de educación médica y la incorrecta prescripción de los medicamentos.
El mejor tratamiento para el asma son los antiinflamatorios de las vías aéreas. Sin embargo, en muchos casos, los pacientes no reciben la prescripción correcta o abandonan el tratamiento. La falta de acceso a los medicamentos es otro factor implicado. Tener el asma bajo control significa no presentar síntomas, no tener limitación para las actividades físicas habituales y no necesitar medicación aliviadora rápida o de rescate.
Frente a la falta de programas de asma y políticas de salud, diferentes sociedades científicas y organizaciones han conformado un grupo asesor para proponer la Ley Nacional de Asma en Argentina. El objetivo de esta ley es permitir la capacitación, educación, prevención y, fundamentalmente, acceso al tratamiento para que los pacientes puedan llevar una vida digna y de calidad.