Por Redacción Curar con Opinión
El jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, confirmó esta mañana que la Ciudad de Buenos Aires no planea aplicar nuevas restricciones ante el incremento en la curva de casos de coronavirus y la llegada de la variante Ómicron. «Hay que reconocer que hubo un aumento de los contagios, pero por ahora no es una situación para alarmarse«, enfatizó.
En declaraciones a Radio La Red, la autoridad capitalina enfatizó que actualmente CABA aplica «muy pocas restricciones» y anticipó que estiman mantener las mismas normas a pesar del alza en los casos durante las últimas semanas. En este sentido, resaltó que mantener en este sendero se vincula a la responsabilidad individual y remarcó que «depende mucho de nosotros que no tengamos que hacer marcha atrás».
De este modo, el Gobierno porteño revalidó su postura de que no se sumará a la iniciativa de otras provincias como Córdoba o la provincia de Buenos Aires de implementar un pasaporte sanitario. Actualmente, CABA exige un certificado de doble vacunación para espectáculos masivos, culturales y deportivos, como así también para locales bailable.
Otro de los objetivos del pase sanitario es impulsar a que completen el esquema de vacunación todas las personas que solo se aplicaron una sola dosis, especialmente los jóvenes. «En la ciudad de Buenos Aires no estamos ante una situación de alarma y eso porque tenemos un plan de vacunación muy avanzado. El 84% de la población total tiene dos dosis y el 15% de la población tiene su tercera dosis», argumentó el funcionario.
El último viernes, el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, reconoció que «en los últimos diez días tenemos un aumento bastante sistemático de los casos» y precisó que la media móvil promedio es de 450 casos nuevos por día. Asimismo, descartó que el alza en los casos sea efecto del avance de la variante Ómicron y reafirmó que el incremento en la curva de contagios responde a «la ola de la variante Delta».